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Fecha: 03/03/2011
Los proyectos de cinco equipos de estudiantes vascos compiten en el torneo de robótica de Lego. Defenderán este sábado en Bilbao sus diseños para mejorar la existencia de personas discapacitadas
03.03.11 - 02:30 -
Se puede ser inventor y crear algo revolucionario sin necesidad de lucir una acreditación de la Nasa o de la agencia espacial europea. Cinco grupos de chavales vascos, cuatro de ellos guipuzcoanos y uno vizcaíno, han llegado a la final estatal del torneo mundial de Robótica First Lego League con proyectos científicos rompedores que buscan mejorar el día a día de las personas que padecen alguna discapacidad de nacimiento o sobrevenida.
Que una persona ciega pueda caminar sin la ayuda de un bastón tanto en la calle como en el interior de un edificio, que quien perdió la lengua o el sentido del gusto pueda volver a saborear una comida, que una persona en silla de ruedas pueda conocer en tiempo real la situación de las calles que transita o que el ligamento de la pierna de un futbolista vuelva automáticamente a su posición original para evitar una rotura inminente son, a grandes rasgos, las propuestas científicas que presentarán los cinco equipos en la First Lego League (FLL) que se celebrará el próximo sábado en Bilbao.
Esta competición, que se disputa en todo el mundo a la vez, es un torneo internacional con formato de evento deportivo que pretende fomentar las vocaciones científicas y tecnológicas, así como los valores de la innovación, la creatividad y el trabajo en equipo. Este año, el reto lanzado en todo el mundo es 'Body Forward' o las biomedicinas. Cada equipo debe afrontar este desafío presentando un proyecto científico y un proyecto técnico, así como programando y diseñando un robot elaborado a partir de las típicas piezas de Lego Mindstorm.
La Agencia Vasca de la Innovación, Innobasque, es la encargada de organizar la final de la First Lego League de España. En el torneo participarán más de 300 chavales de entre 9 y 16 años divididos en 32 equipos, entre ellos los cinco equipos vascos, que han llegado a la final estatal por la calidad de sus proyectos científicos y técnicos, por su profesionalidad como grupo de trabajo y por el diseño y programación de los robots.
Caminar sin bastón
Los equipos son Arizmendi Ikerlan, de la Ikastola Arizmendi, en Arrasate; Overclock Axular Taldea, de la ikastola Axular de Donostia; LSBideluze, de La Salle Berrozpe, de Andoain; Prototype, el equipo de Leintz Gatzaga formado a partir de la asociación de padres y madres de este municipio guipuzcoano, Gurel; y Laurobang, de Lauro ikastola, en Loiu.
Lograr que el día a día de los invidentes sea lo más fácil posible ha sido la máxima de dos de estos equipos, el que surge de La Salle Berrozpe y el del Lizeo Axular. Los diez chavales que integran el equipo LSBideluze han ideado un sistema con el que las personas ciegas podrían caminar sin necesitar la ayuda de bastones o perros guías. Lo harían gracias a un sensor de luz inserto en el robot lego que se incorporaría en las zapatillas de la persona invidente y que iría dibujando una línea imaginaria, una ruta, de un punto a otro de la ciudad, que avisaría a la persona de la vía a seguir. El sensor distinguiría colores como negro y blanco, correspondientes a la ruta, pero también rojo (avisaría mediante un pitido de la presencia de un bidegorri), azul (pavimento resbaladizo), verde (presencia de escaleras) o amarillo (paso de cebra).
Overclock también fija sus objetivos en las personas ciegas. Mediante su proyecto, Ukimen Plano Dinamikoen Sistema (UPDS), los chavales del Axular ayudan a las personas con problemas de visibilidad a orientarse perfectamente dentro de edificios no conocidos para ellos sin perderse y evitando obstáculos mediante el diseño de un mecanismo y el desarrollo de un prototipo.
Rutas accesibles
El equipo Prototype, compuesto por cinco chavales de doce años, es el más joven del certamen. Este grupo ha volcado sus esfuerzos en el proyecto Ibiltrack, cuyo objetivo es ayudar a las personas con movilidad reducida que deben desplazarse en silla de ruedas, de forma que puedan hacerlo sin problemas en determinados municipios gracias al apoyo de un GPS o guía electrónica que les avisa de las rutas accesibles en Leintz Gatzaga y Eskoriatza. Baches, rampas, pavimentos irregulares, quedan registrados en internet y se pueden descargar a un móvil, por ejemplo, o conocerse en tiempo real. El dispositivo también es útil para las personas que empujan carritos de niños y camillas.
Arizmendi Ikerlan ha desarrollado un proyecto cuyo objetivo es crear una lengua sintética para aquellas personas que la perdieron por un cáncer bucal, por ejemplo, o que carcecen del sentido del gusto. La forman a partir de células madre y, a través de impulsos electromagnéticos, hacen llegar señales al cerebro con lo que capta esta lengua artificial: los sabores, por ejemplo.
Y, por último, el equipo Laurobang se presenta con un proyecto de prevención de la rotura del ligamento cruzado, una lesión muy común en futbolistas y deportistas profesionales. Los vizcaínos han adherido un microchip al ligamento. Después, colocan un goniómetro en una rodillera que mide el ángulo y, si éste tiene más de 60º, envía una señal al microchip a través de bluetooth. El microchip recibe la señal y emite una pequeña descarga a los cuádriceps para que el ligamento vuelva a su graduación normal.
Los equipos que superen la final española pasarán a la europea (que se celebrará en Holanda) o a la gran final mundial, que este año se disputará en San Luis (EE UU).
